JORNADA DE SEGURIDAD PÚBLICA TUVO NOTORIA PRESENCIA DE SOCIEDAD CIVIL, INTERESADA EN POLÍTICAS PROGRESISTAS

JORNADA DE SEGURIDAD PÚBLICA TUVO NOTORIA PRESENCIA DE SOCIEDAD CIVIL, INTERESADA EN POLÍTICAS PROGRESISTAS

La política degobiernos progresistas aplicada a la seguridad pública apunta a laparticipación ciudadana,  entendida estacomo un elemento más para tener calidad de vida, tal como se concibe a laeducación, salud y vivienda, fue una de las conclusiones a las que el auditorioy los disertantes llegaron en la jornada sobre “Seguridad Pública: un fenómenocomplejo y un desafío central para los gobiernos progresistas”, realizado en lafecha en el Hotel Excelsior.

Tras laexposición de los expertos internacionales en seguridad pública, AlbertoBinder, argentino y Juan Faroppa, uruguayo, además del ministro del InteriorCarlos Filizzola y el politólogo-sociólogo José Carlos Rodríguez se llevó acabo el panel debate. 

Losexpositores señalaron al auditorio que la seguridad debe abordarse en losgremios ya conformados en los barrios, como cooperativas, sindicatos, clubes,grupos de fomento y comisiones barriales conformadas para diferentesreivindicaciones del vecindario.

Esto,teniendo en cuenta que la participación ciudadana no debe impulsarse con gruposde amigos afines y limitarse a ello, sino que debe tener apertura y democracia,siendo partícipes activos todos y todas, sea que profesen religiones diferentes, o tengan opciones sexuales diferentes.
“De locontrario no es participación”, señalaron los expositores, indicando que solode esa forma se tendrán en cuenta las necesidades de todos los sectores y deesta forma el Estado pueda dar respuesta a lo que el barrio requiere.

Laparticipación ciudadana debe reflejarse en el diseño de políticas, y en estesentido,  cada barrio tiene supeculiaridad y necesidades, la gestión local implica construir desde las necesidadesconcretas de la gente.

El siguientepaso es evaluar cómo cumple el Estado cumple. Por un lado, los objetivos, paraqué;  y por el otro, la estructura, quiénesparticipan, siendo incluyentes, porque si las estructuras no son democráticas,no se consiguen los objetivos. El Estado, a su vez, no debe articular eltrabajo con instancias que no son ampliamente democráticas.

Filizzola enfatiza necesidad de seguir ajustando políticas sociales y no a la represión

El ministro del Interior, Carlos Filizzola, expusoen el panel “Los Gobiernos progresistas frente al desafío de la seguridadpública” haciendo énfasis en que la respuesta violenta debe ser la última entener lugar y que los problemas de seguridad ciudadana también deben encararsedesde el punto de vista de la justicia social. Esto, en el marco de la jornada:“La Seguridad Pública: Un fenómeno complejo y un desafío central para losGobiernos progresistas” desarrollada en el Hotel Excelsior.
Filizzola remarcó que es necesario seguir conel norte de ajustar las políticas sociales. “Hoy sabemos que en sociedadesdonde hay desigualdades que causan pobreza, donde hay epidemias deviolencia,  disparidad en la distribuciónde la riqueza, y dan poca atención a áreas sociales como la salud, la educacióny otros aspectos que potencian al ser humano… estas son las sociedades quetienen mayor delincuencia”, dijo.

También cuestionó el sensacionalismo de losmedios de comunicación en cuanto a la cobertura de los acontecimientosafirmando que el exceso narrativo constituye un defecto. “El discurso de que hay aumento del delito e inseguridadciudadana se instala en la sociedad y hace creer que deben sancionarse leyesmás duras y con menos garantías. Esto oculta la realidad con cortina de humoporque ni las leyes procesales ni penales operan sobre las causas de losdelitos, solo sobre los efectos. Las causas no están en las leyes, están en la sociedad; hay que mirar haciaallí, mirar si el Estado está tratando bien a la sociedad”, dijo.

El ministro del Interior resaltó que se haceimperioso “abandonar el paradigma simplista e inútil de la restauración delorden mediante la violencia. Este modelo convierte a todo el problema en uno deautoridad. La respuesta violenta debe ser la última en tener lugar”.
Comentó además que, para impulsar una políticanacional de seguridad ciudadana, el Ministerio del Interior tiene unosprincipios que guían: la multiagencialidad, porque no basta el trabajo de una solainstitución; la interagencialidad, porque hay que trabajar en conjunto; la integralidad,porque hay mucho que aglutinar; la legitimidad, porque debemos ser respetuososa las leyes que garantizan los derechos ciudadanos; y la prevención del delito.

“La seguridad ciudadana es un derecho exigiblee indispensable para garantizar la calidad de vida porque permite la creaciónde condiciones para garantizar el ejercicio de otros derechos. Es necesaria laprotección de la ciudadanía frente a la criminalidad. Seguridad para todos y todasen defensa de la ciudadanía”, finalizó el ministro Carlos Filizzola.


Fuente: 
Departamento de Prensa
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